01. Psicomotricidad
La terapia de psicomotricidad para niños y jóvenes con Trastorno del Espectro Autista (TEA) es una intervención que utiliza el movimiento como herramienta para mejorar su desarrollo físico, cognitivo, emocional y social.
- El movimiento y la experiencia sensorial son fundamentales para el desarrollo infantil, y los niños con TEA pueden beneficiarse especialmente de actividades que les ayuden a explorar y comprender su propio cuerpo, el espacio que les rodea y a las demás personas.
02. Comunicación y lenguaje
La terapia de comunicación y lenguaje ayuda a los niños con autismo a mejorar sus habilidades de la comunicación y del lenguaje mediante el trabajo en una variedad de áreas.
- Se emplean métodos y técnicas didácticas que favorezcan la comprensión y el aprendizaje del estudiante, considerando sus estilos y ritmos de aprendizaje.
- Esta terapia puede ayudar a los niños con autismo a expresarse mejor, comprender a los demás, reducir comportamientos problemáticos, aumentar su independencia y mejorar su calidad de vida en general.
03. Apoyo pedagógico
El Apoyo Pedagógico para niños y jóvenes con Trastorno del Espectro Autista es un servicio especializado de Educación Especial para facilitar el aprendizaje y desarrollo integral de los estudiantes con autismo. Este es un apoyo individualizado y se adapta a las características, fortalezas y desafíos particulares de cada estudiante.
El Apoyo Pedagógico especializado juega un papel fundamental en la educación de niños y jóvenes con autismo, ya que les permite:
- Alcanzar su máximo potencial
- Desarrollar habilidades para la vida.
- Mejorar su calidad de vida.
- Incluirlos en la educación regular.
04. Estimulación Sensorial
Las personas con trastornos del espectro autista (TEA) pueden presentar dificultades en la integración sensorial, suelen tener problemas para procesar, organizar, filtrar y seleccionar la información sensorial que reciben del entorno de manera efectiva,de tal manera que no pueden destacar la información relevante y descartar la innecesaria.
Esta terapia incluye actividades de juego y movimiento que estimulan diferentes sentidos, los 5 comúnmente conocidos: gusto, olfato, vista, oído, tacto, sentido propioceptivo (que incluye músculos y tendones) y sistema vestibular (movimiento). Se enfoca a proporcionar al niño una variedad de estímulos sensoriales en un entorno controlado y estructurado.
05. Desarrollo Cognitivo
El Desarrollo Cognitivo ayuda a los niños con autismo a aumentar las capacidades mentales que intervienen en el aprendizaje, a regular, controlar y manejar sus pensamientos y comportamiento.ya que es común que el autismo afecta las habilidades cognitivas de diferentes maneras y en diferentes grados.
Se trabaja para desarrollar habilidades como:
- La ”teoría de la mente” (habilidad para entender lo que otros sienten o piensan, ver las cosas desde la perspectiva de los demás).
- Funcionamiento Ejecutivo (planificación, memoria de trabajo, atención, iniciación, flexibilidad, controlar emociones y comportamiento).
06. Habilidades Sociales y Afectivas
Las habilidades sociales son reglas, costumbres y habilidades que guían nuestras interacciones sociales con otras personas y el mundo que nos rodea.
Una de las características del TEA son las dificultades que estas personas tienen para el desarrollo de habilidades sociales y de comunicación, con la consecuente limitación para entender señales de naturaleza social que esto supone.
Se emplean actividades que favorecen la interacción del grupo, así como técnicas de modelado, adaptándose a cada niño y a cada situación.
07. Terapia Física
El tratamiento fisioterapéutico es vital para las personas con Trastorno del Espectro Autista. Mediante actividades lúdicas, físicas, sensoriales y ejercicios, la fisioterapia puede tratar las alteraciones de la marcha, desarrollar habilidades motoras, potenciar la fuerza muscular, el control motor, mejorar el equilibrio, la postura, disminuir estereotipias, disminuir contracturas y mejorar la comunicación interpersonal.
08. Estimulación Temprana
La estimulación temprana en el autismo, se realiza mediante técnicas educativas especiales empleadas en niños entre el nacimiento y los tres años de edad para corregir trastornos reales o potenciales en su desarrollo, o para estimular capacidades.
En los primeros años de la infancia, el cerebro del niño tiene una alta capacidad para crear nuevos circuitos neuronales en base a los nuevos aprendizajes y las experiencias vividas. Es lo que se conoce como plasticidad cerebral.